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Aquí se muestran las dos caras
sobre el dinero del mundial...
Chocan EEUU y Cuba por ganancias del Clásico Mundial
por Kevin Baxter y Pedro
Bachelet
The Miami Herald, Washington D.C. Thu,
Mar. 23, 2006. Las Ligas Mayores de Béisbol negaron el jueves una
reclamación del gobernante cubano Fidel Castro de que su gobierno
donaría las ganancias del Clásico Mundial de Béisbol a las víctimas del
huracán Katrina.
En un discurso el martes, Castro se jactó de que los intentos iniciales
de la administración Bush para prohibir que su país participara en el
torneo resultaron contraproducentes y que las ganancias de Cuba en el
Clásico iría a ''los mártires de Katrina''.
Sus comentarios provocaron asombro en los departamentos de Estado y del
Tesoro de Estados Unidos, donde los funcionarios habían logrado un
acuerdo con las Ligas Mayores de que Cuba no recibiría dinero del torneo
y que no se permitirían donaciones a su nombre.
Ese acuerdo entre los organizadores del Clásico --que Japón conquistó--
y el gobierno norteamericano fue necesario para permitir que Cuba tomara
parte en esta primera competencia internacional de béisbol, al estilo de
la Copa Mundial, sin que se produjeran sanciones norteamericanas contra
la isla.
Patrick Courtney, un portavoz de las Ligas Mayores de Béisbol, que ayudó
a organizar el torneo, dijo que el acuerdo del Clásico con la federación
cubana de béisbol estipulaba claramente que Cuba, a diferencia de las
otras 15 federaciones participantes, no recibiría ganancias del torneo.
''Al contrario, a insistencia de los departamentos del Tesoro y de
Estado, Cuba acordó, como condición a su participación en el torneo, que
`no recibiría ningún ingreso, directo o indirecto, ni premios monetarios'',
dijo Courtney en un correo electrónico enviado al Miami Herald.
''Basados en el acuerdo, Cuba no recibiría ganancias del torneo y por lo
tanto, no tiene nada que donar'', agregó.
De hecho, es posible que ninguno de los países reciba pago. Los
estimados iniciales del costo de la competencia de 39 juegos y 17 días
son de $50 millones. Gene Orza, del sindicato de jugadores de las ligas
mayores, dijo que el evento podría terminar perdiendo dinero. Todos los
equipos participantes, incluyendo Cuba, tuvieron todos sus gastos
cubiertos.
Antes de que el equipo cubano se fuera de San Diego, el portavoz de
Cuba, Pedro Cabrera, dijo a los periodistas que el equipo donaría las
ganancias del torneo a las víctimas del huracán Katrina y les pidió que
incluyeran eso en sus reportajes. El administrador cubano, Higinio Vélez,
hizo una declaración similar antes de que el torneo comenzara.
Fin de la noticia del Herald.
A continuación podrán ver como se manejo la información al respecto
desde Cuba comunista. En Cuba tergiversaron los hechos sobre los
posibles premios monetarios.
Reproducimos por su importancia comparativa textualmente la
noticia que publicó el diario comunista juventud rebelde:
Con la
frente en alto hasta el final
Por Dora Pérez, Margarita
Barrios, Francisco Mastrascusa, Luis López, Ricardo Quiza, Norges
Martínez, Amaury E. del Valle y Ricardo Ronquillo
Castro recibe a sus peloteros, en la foto los vemos a todos sonrientes y
felices, el mensaje comunista fue dado.
La Habana, Marzo 22, 2006.
JR. El pueblo cubano lleva muchos años celebrando triunfos y victorias,
no solo de béisbol, sino en otros deportes como el voleibol, el boxeo,
las pesas o los remos. Prácticamente no hay una disciplina deportiva en
la cual atletas cubanos no hayan obtenido alguna medalla, resaltó el
Comandante en Jefe Fidel Castro, durante el acto de recibimiento al
equipo que nos representó en el I Clásico Mundial de Béisbol.
“En los deportes se avanza cada día más, dijo, a pesar de que no somos
egoístas y deseamos que otros obtengan medallas. En la hermana República
Bolivariana de Venezuela, por ejemplo, tenemos muchos entrenadores.
Miles de instructores cubanos han estado y están por el mundo. Y tenemos
la Escuela Internacional de Deportes, con alrededor de 1 500 alumnos.
En ese sentido Fidel afirmó que no nos importa si un día, como debe
ocurrir, los países que hoy no tienen posibilidades de desarrollarse
deportivamente nos ganan todas las medallas. “Nos sentiríamos felices si
tienen esos honores”.
También significó que por primera vez se desarrolló el Clásico de
béisbol, en el cual, como un “ave rara”, fue invitado el equipo de
béisbol amateur de Cuba. “Agradecemos mucho, muchísimo, a las
federaciones deportivas del Caribe y América Latina, que hablaron de no
participar en ese evento si Cuba era una vez más excluida”.
“Siempre agradeceremos ese gesto de parte de aquellos con los que, en
medio de la competencia, lealmente y con todo respeto, nos vimos en la
situación de perder en algunos casos y de vencer en otros, hasta llegar
al evento de ayer, en el cual nos medimos con una de las potencias
deportivas del mundo.
“Nuestra modestísima islita del Caribe disputó, como en otros deportes,
el primero o segundo lugar en ese evento que ha constituido un
acontecimiento de gran magnitud internacional”.
RECONOCEN ÉXITO DE PELOTEROS CUBANOS
Fidel expresó que el amplio recibimiento del pueblo a sus peloteros
trasluce el orgullo no por las victorias de alguien en particular, sino
por las victorias en una competencia que se establece cuando el béisbol
ha sido excluido de los Juegos Olímpicos.
Explicó que en el Clásico Mundial de Béisbol Cuba tuvo que competir con
una serie de reglamentos habilitados por el profesionalismo que cambian
la estrategia de esta disciplina, como el número de lanzamientos de los
pitchers en cada etapa.
Se refirió a que algunos peloteros cubanos habían llegado preocupados
por la reacción del pueblo, al no haber podido traer la medalla de oro.
“Ustedes habían ganado la medalla de oro mucho antes del último partido”,
les dijo a los deportistas. “Ustedes lucharon con la frente en alto
hasta el final”.
TRABAS DERROTADAS
El Comandante en Jefe resaltó la conducta de los integrantes de la
delegación que no se dejó provocar por una minoría de la gusanera que
pretendió desestabilizar a los representes de la Mayor de las Antillas,
y explicó que esa es una muestra más de la impotencia al no poder
derrotar a la Revolución Cubana, que ya es invencible.
Significó que Cuba se hace fuerte en la prestación de servicios a la
humanidad, y agregó que “eso es mucho más digno que espiar, matar,
torturar, bombardear a un país. Nosotros no nos dedicamos a producir
bombas, sino a prestar servicios”.
Luego el líder de la Revolución afirmó que nadie debe pensar que, porque
se apoye a otros pueblos con menos recursos, Cuba trabaje solo para
hacer regalos. “Es un papel generoso el de ayudar a los demás. Nunca se
escuchará que estamos explotando a otro pueblo”, enfatizó.
“Nos duele tanto la muerte de un niño de Timor o de Bolivia, como la de
un cubano. Pero en vez de vanagloriarnos, trabajamos para que otros
puedan tener lo mismo que nosotros. Con un mínimo de recursos se puede
dar un máximo de apoyo a los países del Tercer Mundo”.
Resaltó que no quería hacer política con el deporte, pues “podemos
decirle al poderosísimo imperio que ya se jugó el noveno inning, tenemos
unas cuantas carreras de ventaja, y somos home club.
“Podemos afirmar que el oprobioso bloqueo, las amenazas, en ningún
terreno pueden con Cuba. Es algo que tenemos suficientes elementos de
juicio para afirmar. Tómenlo como un jonrón.
“Si el imperio nos intenta agredir, solo habrá medalla de oro para el
pueblo de Cuba, que ha demostrado su capacidad de resistir cualquier
agresión. No tenemos ni armas nucleares, ni químicas, ni biológicas. No
sé si seremos primer lugar, o medalla de plata, pero ya nos reímos de su
bloqueo, no los necesitamos en lo absoluto”.
CUBA DONA TODAS SUS GANANCIAS
El dinero que recibamos del Clásico Mundial lo entregaremos allá a los
mártires del Katrina. Lo que sea. Si es medio millón, si es un millón,
cinco, siete, lo que sea, lo donaremos.
Así sintetizó Fidel la posición de los peloteros cubanos ante las
ganancias derivadas del I Clásico Mundial de Béisbol, donde el equipo de
la Isla obtuvo el segundo lugar tras una disputada serie, donde pocos
expertos lo daban como favorito.
“Donaremos ese dinero sin la menor duda y con gran satisfacción porque
eso multiplica la moral de nuestros atletas”, afirmó Fidel al pedir la
aprobación de ese gesto a los peloteros, presentes en un multitudinario
acto de recibimiento en la Ciudad Deportiva de La Habana.
Una cifra equivalente a esa ganancia, sea cual sea, vamos a dedicarla al
desarrollo de la pelota en Cuba, afirmó también Fidel, quien explicó que
actualmente a la disciplina no le falta eso, sino que se le agregará
para darle más impulso.
Ni la pelota, ni ningún otro deporte está desatendido ni mucho menos,
sostuvo Fidel.
Las escuelas deportivas, significó, se están renovando y se hacen nuevas
escuelas de iniciación deportiva, si bien la capacidad de esos centros
es de 15 000 alumnos y hoy tienen casi 14 000.
En los centros de formación deportiva hoy se practican 18 disciplinas y
existen condiciones para entrenar en 29 deportes, y tienen los campos en
las escuelas o cerca de ellas, expresó.
El Comandante en Jefe precisó que eso es apenas una parte de lo que hoy
hace el país, por lo cual su prestigio crece cada día como la espuma.
Fidel también ratificó que en ningún momento se había propuesto ni
quería criticar a los equipos profesionales de béisbol de otros países
por aceptar los millones de ganancias del I Clásico Mundial, porque en
esos países no existen las condiciones de Cuba.
“En todos esos países los deportistas se forman solos y solo al final
los atienden”, explicó. “En Cuba el deporte no es solo un
entretenimiento, es una forma de elevar la calidad de vida, la salud, de
poder disfrutar de largos años, dijo. Nuestra sociedad se encamina a la
búsqueda de una calidad de vida superior, una vida más larga, más sana;
y por eso el deporte no es solo un entretenimiento”.
Finalmente, Fidel expresó que “a todos nuestros atletas y a todos los
que le han dado gloria a este país, podemos afirmar que a ninguno les
faltará nunca nada para poder disfrutar una vida digna y decorosa como
la tendrán todos nuestros compatriotas*. Y no voy a decir más tarde que
temprano pues los años pasan rápido, sino que será más temprano que
tarde”.
Un equipo aguerrido y corajudo
“Este es un acto de masas verdaderamente increíble para nosotros”,
exclamó Ángel Iglesias, vicepresidente del Instituto Nacional de
Deportes (INDER), y jefe de la delegación cubana al I Clásico Mundial de
Béisbol.
En el encuentro, al que acudieron unas 15 000 personas en el coliseo de
la Ciudad Deportiva de La Habana, Ángel Iglesias aseguró además que
algunos escépticos ponían en duda la calidad del béisbol cubano; sin
embargo quedó demostrado que ese béisbol está en condiciones de jugar al
más alto nivel y alcanzar resultados acordes a su rango cualitativo.
Con orgullo comentó que todos los integrantes de la delegación
triunfante retornaron a la Patria, a pesar de los múltiples intentos de
nuestros enemigos por lograr que alguien desertara, ofreciéndoles a
cambio altas sumas de dinero.
“Queremos también resaltar los mensajes de estímulo que en todo momento
recibimos, con marcado énfasis en las misivas que enviaron los cinco
cubanos que injustamente permanecen encerrados en cárceles de Estados
Unidos por luchar contra el terrorismo”, añadió.
A todos ellos dedicamos esta victoria alcanzada con honor, dignidad y
patriotismo, señaló.
El torpedero Eduardo Paret, capitán del equipo cubano que obtuvo medalla
de plata en el I Clásico Mundial, entregó al Comandante en Jefe Fidel
Castro la bandera que el equipo caribeño llevó a la competencia. En el
acto, Yoandy Garlobo obsequió al líder de la Revolución dos pelotas
firmadas por todos los miembros de la escuadra criolla.
A su vez, el Comandante en Jefe Fidel Castro regaló a cada uno de los
atletas un bate de madera decorado con atributos y símbolos patrios con
la leyenda: “Felicidades, campeones”.
*Nota: Cuando Castro se refiere a compatriotas, se refiere a sus
representantes, miembros del gobierno y su élite comunista. El pueblo
cubano padece de hambre y necesidades.
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