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MOVIMIENTO CUBANO UNIDAD DEMOCRÁTICA

"Trabajando juntos por Cuba Libre"

 
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Vayamos realmente de la ley a la ley.

"Cada pueblo se cura conforme a su naturaleza,
que pide diversos grados de la medicina,
según falte éste u otro factor en el mal,
o medicina diferente.
Ni Saint-Simon, ni Karl Marx, ni Marlo, ni Bakunin.
Las reformas que nos vengan al cuerpo.
Asimilarse lo útil es tan juicioso,
como insensato imitar a ciegas".

-José Martí-

I- Preámbulo

Compatriotas, no importa donde residas ni a cual
organización estés afiliado, la unidad se impone
porque aumentan las posibilidades de una componenda
entre los funcionarios del régimen que nos oprime hace
casi medio siglo y aquellos cubanos que, ya sea por
convicción, conveniencia o desconocimiento, quieren
reciclar a los causantes del mal, a los militantes del
partido comunista.

Estos planes no andan ocultos. Mientras Oswaldo Payá
lanza la propuesta de amnistía para los comunistas e
intenta buscar consenso para ese y otros planes
mediante asambleas controladas, el director de la
revista Disidente, Ángel W. Padilla, dice que "ya no
queda ni una veintena de personas responsables junto a
Fidel (Castro) de la traición y que este número
bajaría porque algunos de ellos se sumarían a la
transición apoyando a la oposición ...".

La ética elemental indica que tenemos que presentarnos
en la palestra para rebatir, con respeto pero
enérgicamente estos y otros sofismas, porque de no
hacerlo cualquiera podría pensar erróneamente que la
tragedia cubana se resuelve con unas cuantas reformas
limitadas.


El eslogan "ir de la ley a la ley" confirma las
intenciones de contemporizar con la asociación
política que impone normas injustas, perjudica la
existencia misma de la sociedad cubana y comete
crímenes de lesa humanidad para sostenerse en el
poder. El martirologio cubano es la prueba irrefutable
de esta verdad, y nadie tiene la potestad ni el
derecho de amnistiar a los culpables de esos actos
inhumanos.

Por tanto, la lógica impone ir de la arbitrariedad a
la ley mediante un proceso en que los cubanos
-dondequiera que residan- tengan el derecho a
participar plenamente y no puedan ser ni engañados, ni
controlados, ni excluidos, ni se le impongan líderes
que no han escogido o seudo opositores que cabildean
con cualquiera de las partes a ver donde sacan mejor
provecho para su proyecto personal.

Para ir de la arbitrariedad a la ley sólo tenemos que
derribar un obstáculo: el régimen opresor.

Cuando nos quitemos el yugo comunista tendremos que
valernos de la consulta popular para que la mayoría
decida sobre la minoría pero respetando a esta. Sin
embargo, ninguna sociedad puede decidir acertada e
inteligentemente sin la información que le posibilite
este acto. Por lo tanto, primero debemos informar al
pueblo y luego él podrá elegir lo que crea que le
conviene.

Los partidarios del "borrón y cuenta nueva" se engañan
a sí mismos y a la nación cuando aseguran que los
comunistas "se sumarían a la transición apoyando a la
oposición".

¿Por qué no se le unen ahora que los principales
opositores están injustamente encarcelados?

Cuando el régimen entre en coma y su muerte sea
inminente no tiene ningún mérito unirse a la razón.
Quien no se una con tiempo a la oposición, o por lo
menos renuncie públicamente a colaborar con los
opresores, no podrá argumentar en su defensa que se
arrepintió de sus acciones. La estrategia de "cambiar
de casaca", de "montarse en el último vagón del tren",
de "cambiar de color como el camaleón" no puede ser
moral ni legalmente tolerada.

No queremos venganzas, ni actos inhumanos, ni tratos
crueles. Queremos justicia. ¡Y nadie tiene potestad
para quitarnos este derecho!


Con la firma de este documento contraemos el deber de
defender la siguiente declaración de principios y
exigiremos su cumplimiento ante los órganos a cargo de
administrar justicia y conducir la transición cuando
Cuba sea libre. También nos comprometemos
voluntariamente a luchar por cada aspecto de esta
declaración con todos los medios éticos y legales que
podamos hasta que los hagamos realidad.


II- Declaración de Principios

1- Reinstaurar la Constitución de 1940, el Tribunal de
Garantías Constitucionales y los códigos abolidos
arbitrariamente por los comunistas para que los
cambios legales necesarios se hagan realmente desde la
legalidad. Aceptar como punto de partida las reglas
injustas impuestas por el terror es contemporizar con
el mal.

2- Se reorganizará el poder judicial de acuerdo con
los postulados de la Constitución de 1940 y la Ley
Orgánica del Poder Judicial vigente en Cuba antes del
10 de marzo de 1952. Disolución del actual Tribunal
Supremo y los órganos provinciales. Además, los jueces
y fiscales que hayan actuado en juicios en contra de
opositores al régimen de Fidel Castro se declararán
inhabilitados permanentemente para el ejercicio del
Derecho.

3- Establecer un tribunal especial para recibir las
denuncias de crímenes cometidos por funcionarios del
régimen comunista, sin excepciones, que las analice,
las investigue, radique las causas que tengan lugar,
las procese y condene o absuelva a cada demandado
conforme a Derecho.

4- Que se establezca otro tribunal especial para
recibir y procesar las demandas de todo cubano o
extranjero cuyas propiedades muebles o inmuebles le
hayan sido quitadas por el régimen comunista. Todo
perjudicado debe recibir compensación.

5- Todo el que comercie con el régimen comunista y sea
acreedor del mismo que le cobre a los opresores lo que
este le debe, pues cuando la sociedad cubana se libere
no tiene por que asumir obligaciones que no contrajo.
El partido comunista es el único responsable de esas
deudas. Además, todo bien (ya sea inmueble o mueble)
producto de inversiones de extranjeros con el régimen
opresor debe ser decomisado, excepto a aquellos
empresarios que ahora apoyen a la oposición
anticomunista.

6- El partido comunista de Cuba debe ser declarado
ilegal y los integrantes del mismo que no apoyen a la
oposición desde ahora deben ser invalidados de por
vida para ocupar cargos públicos.

7- Antes de efectuarse elecciones auténticas tiene que
haber un período de tiempo suficiente para que se
organicen los partidos políticos y se informe
debidamente a la nación para que pueda elegir
inteligente y acertadamente.

8- Se debe usar el plebiscito como instrumento legal
para conocer la voluntad popular respecto a los
asuntos de gran importancia para la nación, el país y
el futuro de ambos.

9- Los órganos represivos, sin excepción, serán
desmantelados y sus integrantes desmovilizados sin
derecho a retiro. Esta medida no se aplicará a quienes
desde ahora apoyen a la oposición o renuncien
públicamente a sus cargos declarando que dejan de
colaborar con el régimen comunista.

10- Reestructuración profunda de las fuerzas armadas,
suprimiendo el Servicio Militar General. Los efectivos
de las fuerzas armadas serán disminuidos hasta en un
tercio de su número actual. La alta oficialidad que ha
dado su apoyo al régimen será llevada a retiro sin
derecho a compensaciones. Los nuevos cuerpos armados
de la República se organizarán en el respeto y
obediencia a los principios de la Constitución y en el
acatamiento a los gobiernos democráticamente electos
en consonancia con la Ley Magna.

11- Se debe consultar al pueblo cubano para que
decida mediante un referendo si se retira de la
Organización de Naciones Unidas porque esa entidad no
condena efectivamente al régimen que ahora nos oprime
y recibe a sus funcionarios como embajadores
auténticos cuando la realidad es que usurpan el poder
hace casi medio siglo.

III- Llamamiento

Desde este espacio de libertad que es el semanario A
Fondo convocamos a la unidad de los cubanos que
coincidan con estos preceptos. Suscribirlos constituye
únicamente el deber moral de luchar por ellos hasta
hacerlos realidad.


IV- Nota

Este documento se ha enviado a organizaciones pro
democráticas con sede en Cuba y en el extranjero, a
gobiernos auténticos, a quienes comercian con los
opresores de la nación cubana, a la prensa libre y se
seguirá comunicando a cuantas partes sea necesario
para su difusión.

Se agradece que el mismo sea publicado por todo medio
que quiera contribuir a esta causa.

Quien firme este documento y, por determinadas
circunstancias, no quiere que su nombre sea divulgado
debe especificarlo para proteger su derecho a
permanecer en el anonimato hasta que no corra ningún
riesgo por revelar su identidad.

Para suscribir este documento envíe un mensaje
electrónico a  semanarioafondo2@yahoo.com  que diga "Me
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y apellidos, ciudad y país de residencia, así como la
afiliación política u otra que considere pertinente.
También indique en su correo si quiere que su nombre
sea publicado en nuestro sitio en Internet, o si no
quiere revelar su identidad por el momento.

Miami, 14 de junio de 2004

V- Firmantes

1- Lázaro González Valdés / ex prisionero político /
Miami, USA / semanario A Fondo
2- Mario J. Viera González / ex prisionero de político
/ Miami, USA / semanario A Fondo