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Artículos
Los archivos de Reyes, un desafío regional
Por Andrés Oppenheimer
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y su colega de Ecuador, Rafael
Correa, podrán gritar todo lo que quieran, pero lo cierto es que han
sido atrapados in fraganti cuando apoyaban a un grupo terrorista que
está tratando de derrocar al gobierno democráticamente elegido de
Colombia.
La semana pasada, después de que Interpol, la organización policial
internacional más grande del mundo, hizo público su informe en el que
certificó la autenticidad de 37.872 archivos de computadora de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que contienen cientos
de referencias al activo apoyo de Venezuela y Ecuador al grupo armado
rebelde, Chávez y Correa reaccionaron, como lo hacen siempre, con
insultos.
Al igual que hace unos meses, cuando una delegación oficial venezolana
fue descubierta cuando trataba de ingresar 800.000 dólares en efectivo
en la Argentina para sus aliados políticos en el país, Chávez alega
ahora que la investigación de Interpol sobre las computadoras
encontradas por el ejército colombiano en su ataque contra un campamento
de las FARC en Ecuador es "una
payasada del imperio , y describió al secretario general de Interpol,
Ronald K. Noble, como "un mafioso y "un vagabundo . El descargo de
Correa fue de virulencia similar.
Esta vez, sin embargo, les resultará difícil hasta a los más crédulos
simpatizantes de Chávez y Correa tomar en serio estos juegos de
pirotecnia verbal.
En la investigación realizada por la sede central de Interpol en Lyon,
Francia, participaron 64 funcionarios policiales de 15 países,
encabezados por expertos mundiales en computación de Singapur y
Australia, que fueron escogidos independientemente por las jefaturas de
policía de sus países. En total, el equipo en pleno de Interpol dedicó
5000 horas a examinar las computadoras.
Y el informe final de Interpol no sólo concluyó que Colombia no había
manipulado el contenido de las computadoras, como aducen Chávez y
Correa, sino que también certificaron que pertenecían a Raúl Reyes, el
segundo líder de la FARC, que resultó muerto durante al ataque del
ejército colombiano.
Un tesoro de inteligencia
Las laptops de las FARC son uno de los tesoros de inteligencia más
importantes de toda la historia de la lucha antiguerrillera en la región,
dicen expertos en seguridad. Los documentos ya han permitido el
secuestro de US$ 480.000 de fondos de las FARC en Costa Rica y de 30
kilos de uranio no enriquecido de la guerrilla en las afueras de Bogotá.
Entre cientos de revelaciones, los archivos contienen 8 referencias a
US$ 300 millones de ayuda que Chávez les había prometido a las FARC.
Otros documentos aluden a una contribución de US$ 100.000 de las FARC a
la campaña presidencial de Correa en 2006.
La certificación de la autenticidad de los documentos plantea varias
preguntas espinosas.
Primera pregunta: los países latinoamericanos que correctamente
invocaron los tratados de no intervención de la Organización de Estados
Americanos (OEA) para rechazar la incursión militar colombiana en
Ecuador, ¿invocarán ahora los igualmente explícitos tratados
antiterrorismo de la OEA, que prohíben a los países ayudar a grupos
armados rebeldes?
¿Condenarán a Venezuela y a Ecuador, o se harán los distraídos,
temerosos de perder los miles de millones de dólares que reciben en
petróleo y ayuda política por parte de Venezuela?
Segunda pregunta: ¿Chávez y Correa les pedirán disculpas a los países de
la región, tal como lo hizo el presidente colombiano, Alvaro Uribe, el
18 de marzo en la reunión de la OEA en que se debatió el ataque
colombiano al campamento de las FARC en Ecuador?
Tercera pregunta: ¿la OEA convocará a una asamblea general, invocando la
Convención Interamericana contra el Terrorismo de 2002, que prohíbe a
los países miembros dar refugio o dinero a grupos terroristas? ¿Y el
Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas invocará sus resoluciones
1373 y 1566, que establecen exactamente lo mismo, para condenar a Chávez
y a Correa?
Cuarta pregunta: ¿el presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva se
retractará de su reciente declaración en el sentido de que Chávez es "el
mejor presidente que ha tenido Venezuela en los últimos cien años"? ¿O
cree que apoyar a un grupo terrorista que mantiene secuestrados a más de
700 rehenes y que mató a 36 civiles que asistían a una boda en el Club
El Nogal
de Bogotá es ser un buen presidente?
Mi opinión: para que quede claro, no estoy de acuerdo con la propuesta
de algunos legisladores republicanos de Estados Unidos de que Washington
ponga a Venezuela en su lista de países terroristas e imponga sanciones
a ese país. Eso sólo le daría a Chávez argumentos para mostrarse como
una víctima del "imperio .
Pero la comunidad internacional, incluyendo a quienes criticamos al
presidente George W. Bush por ignorar a la ONU cuando decidió invadir
Irak, debe reaccionar rápidamente. De otra manera, no tiene ningún
sentido que sigan existiendo la OEA, la ONU ni ninguna de las
convenciones internacionales que los países han firmando con gran
solemnidad.
Fuente: El Nuevo Herald
Martes 20 de mayo de 2008.
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